El Servant Grunt, mejor conocido como Mr. Face, es uno de los enemigos principales en Amnesia -The Dark Descent- y parte de Los Recolectores, fieles sirvientes de Alexander von Brennenburg.
Esta Historia se remonta a los tiempos de la Guerra de los Treinta Años. Se cuenta que los soldados que abandonaron su deber se perdieron en los fríos y oscuros bosques, condenados a vagar por siempre en estas tierras.
Sus cuerpos consumidos por sus almas corrompidas quedaron desfigurados y vacíos. Muchos los han visto a lo largo de los años y los describen como espectros horripilantes. Se mueven silenciosamente por los bosques, rehuyendo de cualquier espectador.
Se les llama los Recolectores porque su meta parece ser robar criaturas vivas. Lo que revela su presencia es su presa, a la que se puede oír forcejeando dentro de los húmedos sacos de estopa mientras la arrastran tras ellos ¿Cuál es su siniestro propósito?
El proceso de transformación es completamente desconocido, pero se especula que fueron víctimas de los experimentos del Barón Alexander, quien convirtió a sus sirvientes en estas criaturas al darles de beber vino contaminado. Después, le serían ofrecidos a malignas entidades del más allá, que los transformarían para adaptarse mejor a sus nuevos cuerpos.
Asumiendo que Alexander está detrás del proceso de transformación, estas criaturas han estado a su servicio desde 1600, capturando humanos y animales para los experimentos de su amo. También se encargan de patrullar los corredores del castillo y realizar algunas tareas cotidianas. Cuando algún visitante llega a Brennenburg, ocultan su grotesca apariencia con túnicas y se vuelven extremadamente sigilosos.
Los Grunts son los Recolectores más débiles y comunes dentro del castillo. Son repulsivas entidades antropomorfas que parecen estar hechas con partes humanas, cubiertas con vendajes y cuerdas. Sus cabezas se han malformado, con una enorme mandíbula que se estira hasta su torso y un par de ojos de reptil. Su mano derecha es normal, mientras que la izquierda se ha convertido en un enorme tumor del que brotan largas garras.
No pueden hablar y solo emiten rugidos guturales. Si prestas un poco de atención, pareciera como si intentaran articular ciertas palabras. Su visión y olfato son muy finos, ya que pueden descubrirte desde largas distancias. Mirarlos de frente reduce tu Cordura drásticamente.
Su inteligencia es cuestionable, ya que son bastante ineficientes en sus pesquisas. No te notarán a menos que estés a plena vista o los mires por un tiempo prolongado. Permanecer agachado en una esquina oscura es suficiente para estar a salvo hasta que pierdan el interés y se marchen del lugar.
En otras ocasiones, no te quedará otra opción más que lanzarles algo para que retrocedan y salir corriendo. Las criaturas son ligeramente más rápidas que tu y pueden correr para perseguirte. Son capaces de romper puertas y otros obstáculos para matarte. Tres de ellos trabajarán en equipo para atraparte en la recta final del juego.